El heredero de la batuta

Ahora que al fin ha llegado a buen término el fichaje de Cesc Fàbregas el cual mantendrá su apellido plasmado en la camiseta, podemos hablar del muchacho en términos futbolísticos y no de si es caro o de su conveniencia de ficharlo por motivos de creencias.
En mi opinión, llega a un equipo que tiene poco margen de mejora para conseguir darle un puntito más y darse a sí mismo ese mismo plus extra (qué parecido suena esto a aquello de plus ultra, ¿no? ¡Qué repelús!)
Siguiendo con mi análisis personal, Cesc ocupará en el escalafón del medio del campo ni más ni menos que la segunda posición por detras de Xavi Hernández.
Alguno ya habrá exclamado que lo dicho es una herejía por situarlo por delante de Andrés Iniesta pero yo sigo sin ver al manchego con la capacidad de dirigir al conjunto cuando faltan los jefes de la manada que sí le veo al ya excapitán del Arsenal.
Y la mejora respecto a Busquets también es extraordinaria empezando por el capítulo goleador y más si tenemos en cuenta que viene de un liga donde el tackle y el contacto son el pan suyo de cada día.
Eso sí, se perderían centímetros en un juego aéreo que ya de por sí es justito.
Podría ser más elegante y decir que la diferencia entre unos y otros jugadores es prácticamente insignificante y que se podría comparar con las milésimas que otorgan los jueces de gimnasia rítmica o de saltos de trampolín pero yo lo veo como lo he expuesto.

Ahora vamos con las matemáticas y los negociadores que creo que son Zubi, Bartomeu y la portera del condenado por el caso Hacienda Josep Lluís Núñez.
Primero quiero destacar que el fichaje por 29 millones es una cifra más que correcta para uno de esos jugadores únicos del mercado (de nuevo sin volver a caer en lo de rasgarnos las vestiduras con que si era nuestro, etc) y que los cinco como máximo en variables que habría que pagar en caso de que se consigan dos ligas y una Champions en los próximos cinco años me parecen que es un buen objetivo para ambas partes.
Ojalá que se paguen íntegramente.
Llego al fin a aquello que habían anunciado los de las políticas de austeridad.
Habían dicho que se dispondría de 40 millones más lo que se obtuviese en las salidas para hacer frente a los fichajes y que si no, habría que recurrir a dinero futuro para aumentar el presupuesto.
Resulta que sólo el fichaje de Alexis se funde en fijo unos 28 kilos más los 29 de Cesc, da un total de 57. A Bojan se le vende con la obligación de recomprarlo en dos años por unos 10 millones y con los traspasos de Romeu y Jeffren, se quedaría casi a la par pero ... ¿y dentro de un par de años cuando haya que pagar hasta 5 de variable por Fàbregas, hasta 10 por Alexis y recomprar a Bojan, de dónde cojones sacamos el dinero para hacer fichajes?
¿Habrá que pagar Supercopa, Copa, Champions y los frankfurts costarán 12 euros o qué?