Hace ya unos días que vengo dándole vueltas al fichaje chollo de este verano.
En mi opinión, los 20 millones que va a costar el traspaso de Osvaldo viendo las cifras en las que nos movemos, parece un precio más que razonable.
Si a mí me dan a elegir entre el chileno Sánchez por casi 40 y el italo-argentino por la mitad, no hay color.
Veremos si con el devenir de la temporada mi apuesta hubiera sido más o menos atinada.
Total, que parece que es la Roma de Luis Enrique quien pujará por el aún nueve perico.
Decían hoy en unas noticias que allí se reencontraría con De La Peña que es el segundo de Lucho.
Pues horas más tarde escucho que el cántabro se desvincula de la entidad romana por motivos personales.
Poderosos motivos deben ser cuando uno renuncia a una oportunidad así sin experiencia previa en los banquillos pero ya se sabe que se alegan esos motivos para todo.
Es como si a mí me llevan de segundo del jefe de personal de una empresa y a los dos meses en vez de labrarme un futuro puteando a los trabajadores, les digo que me largo.
Y como causa-efecto a mi anuncio de las ganas que tengo de competición, pues van los futbolistas y montan una huelga.
Yo estoy con ellos aunque sólo sea por la cara que gasta el Astiazarán ése y por cómo los cracks se solidarizan con sus compañeros.
Eso sí, supongo que otro pelat como es Rubiales será mejor negociador que orador porque tela.
jueves, 11 de agosto de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario