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domingo, 17 de abril de 2011

El equipo pequeño

Supongamos una estadística de posesión de balón en la que un rival tiene el cuero en el 75 por ciento del total mientras que el otro la tiene durante escasamente un 25.
La lectura que hará alguien a quien le gusta el fútbol será: vaya, el Levante ha ido a Can Barça.
Lo curioso del caso es que eso es lo que le pasó al Madrid y no como visitante sino como local.
Utilizar argucias como la de dejar la hierba alta y no regarla o poner a Pepe como centrocampista en detrimento del maravilloso Özil son como para echar a Mourinho del colegio de entrenadores de balompié.
Lo de encharcar el campo recuerda a tácticas de David Vidal con el Logroñés para recibir al Dream Team pero claro, hablamos de equipos que jugaban no ya ligas diferentes sino casi en dispares dimensiones.
Se queja el técnico luso de que siempre le expulsan a un jugador.
Quizá le podía haber explicado a Albiol que en el estado en el que se encuentra Villa, mejor haberle dejado rematar o que al menos no le hubiese practicado una llave de lucha grecorromana.
Lo normal es que hubiese fallado pero aunque hubiese acertado, se hubiese evitado la tarjeta roja.
Será mejor que omitamos lo que pasó en la primera parte en un encontronazo entre el Guaje y Casillas y que no nos echemos a reír ante el hecho de que Pepe recrimine una acción a Messi haciéndole gestos en plan: estás loco.
El equipo del señorío, al cual para que no se queje le han colocado sus dos árbitros preferidos para jugarse liga y copa contra el Barça, sigue en su campaña de descrédito sólo protegido por el Clan del oso (y el madroño) cavernario.
Ya veremos con árbitro europeos cómo va el cruce de Champions.
Del encuentro en sí sólo quiero destacar la falta de instinto asesino de los de Guardiola que en una competición por eliminatorias te puede dejar fuera por algún descuido.
La empanada esa que de vez en cuando arrastra Busquets perdiendo balones en defensa o la falta de iniciativa que a veces atesora Iniesta cuando los partidos son a cara de perro además de la baja forma de Pedro me parecen los puntos débiles para joderme el desplazamiento a Valencia del miércoles.
Máxima concentración e intensidad y si Pinto se puede resentir del tobillo, mejor que mejor.

3 comentarios:

David dijo...

Es todo muy surrealista: celebran un empate como si hubieran sido ellos los que estuvieran a 8 puntos, que si con 10 se juega mejor (ver portadas de As y Marca ayer), pues si salen el miércoles con 9 quizás jueguen como Brasil en el 70 y nos ganen, para luego criticar la expulsión (pero no jugabais mejor con 10???), luego que si Mourinho es adivino (por lo de jugar con 10, otra vez) y ha conseguido parar al mejor Barça de la historia, y encima le lamen el culo sin recato después de haber sido humillados en la esperpéntica rueda de prensa postpartido, y podría seguir días y días!

Como está el periodismo deportivo!

Salud
D.

PD: Viendo como iba el partido no me puse ni nervioso! Cosa extrañísima en mí.

€du dijo...

A ver si en esta final de copa no te confunde la noche (o la tarde) y puedes llegar a tu sitio sin saltar de grada en grada y contar qué tal ha ido.

PD: Opto por Marchena, pero ¿Sergio Ramos no está en el top de la rabia?

hostiamor dijo...

Hombre, por poder ponerse, cabrían millones de jugadores y no jugadores pero yo al sevillano no le tengo tanta manía.
Ten en cuenta que tú a duras penas debes recordar a Hugo Sánchez, Buyo, Chendo, Tomás Reñones, ...
Los que hemos sufrido eso y encima siempre palmando conseguimos soportar a Mou con cierta solvencia.