Tierra quemada

Otra visita al Bernabéu y otra victoria más.
¿Recordáis cuando cada visita era un auténtico suplicio y por ejemplo Johan Cruyff siempre nos obsequiaba con algún invento defensivo que le acababa saliendo fatal?
Este Barça actual juega como sabe y a lo que sabe vaya donde vaya. Y no hay ninguna duda que para la sequía de triunfos a domicilio, visitar a los blancos es un chollo porque es sinónimo de victoria.
Después del partido de liga me hizo gracia la reflexión de un aficionado blanco que decía que ellos eran el Atlético del Barcelona.
Entramos en el análisis del partido.
Como ya hemos anticipado, posesión de balón de equipo pequeño en casa para los de Mourinho que sólo buscan montar el contraataque diabólico que es capaz de comandar Cristiano Ronaldo en la única aparición destacable y que no sería tal si Pinto hubiese rechazado el disparo asequible.
En el once inicial de los visitantes, el gaditano era la única nota pintoresca mientras que en los locales, parecía como si un brujo hubiese cogido dados o huesos de pollo con los nombres de los futbolistas y los hubiese lanzado al azar.
Vamos, que lo del rompecabezas lo ha solucionado a la brava y fatal.
A los delanteros no se les ha visto en todo el partido, a los centrocampistas se les ha detectado repartiendo leña al igual que a sus compañeros los zagueros.
A mí que me explique Andújar o algún otro analista arbitral cómo pueden no expulsar a Carvalho con el patadón por detrás que le pega a Messi que por cierto no está demasiado fino.
La acción del loco Pepe de pisarle la mano al argentino es disculpable (quiero decir disculpable para el colegiado no para el jugador, obviamente) aunque debieran actuar de oficio los Soprano, perdón, los miembros del Comité de Competición.
El título de la entrada hace referencia a esta forma de actuar de los conjuntos de Mourinho.
Ese rato en que Cristiano Ronaldo ha jugado de segundo lateral zurdo emulando al Eto'o del Inter cuando los italianos se clasificaron en el Camp Nou es un claro ejemplo.
Y es que cuando el de Setúbal deje alegremente el club de Chamartín el panorama que quedará a sus espaldas será algo desolador.
Será como el capitán del Costa Concordia que deja que el barco se hunda y sale silbando tranquilamente. No haré el símil de que dejará un solar porque si no Florentino es capaz de construir algo.
Del Barça me ha encantado además del habitual juego de combinación, la figura de Alexis Sánchez partiéndose la cara en ataque y en defensa y el hecho de haber conseguido el primer gol de remate directo en un córner.