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sábado, 22 de diciembre de 2007

Clase o actitud

Viendo ayer la forma de entrenar del Ronaldinho entre risitas y jueguecitos y la posterior llamada al orden de Rijkaard, me da que se va a quedar el brasileño en el banquillo. Y eso creo que sería definitivamente sellar su traspaso en junio (dudo que en enero).
La situación era esperpéntica hasta el punto que Sylvinho, uno de los excelentes profesionales que tiene el Barça y por lo visto mejor persona, optó por echar una buena bronca a su compatriota el pasota.
Yo hace ya un tiempo que pienso que diez Gattusos ganarían en un partido a diez Ronaldinhos. Ojo, que ya lo pensaba en los momentos del glorioso Ronnie que todo lo hacía bien y que nos encandiló.
Parece que mañana vamos a ver el clásico del sacrificio y el músculo en vez de uno con tanto glamour y estrellitas.

Por otro lado, gracias a la compra de TVE de la liga inglesa, tenemos la oportunidad de ver un montón de partidos interesantes de Inglaterra. Además el comentarista es muy bueno y de apoyo hay un tal Marcelino. Yo creo que es aquel central del Mallorca que jugaba con una tirita en la nariz y que hacía pareja con Iván Campo. Aquel fichó por el Newcastle y no llegaría ni a jugar diez partidos por culpa de las lesiones. Voy a googlear.
Efestivamente. Ahí va un link por si a alguien le interesa: Marcelino

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo siento si soy un iluso, pero yo soy pro -Ronnie, no creo que en un verano se pueda pasar de ser el mejor a un estorbo por mucha fiesta que te pegues. En partidos como este es donde tiene que jugar y demostrar, y que se quede en el banquillo cuando el barça salga del Camp Nou y haya que trabajar, aunque un tal Yaya Toure podría quedarse solo en el campo y haria el trabajo de los 11 perfectamente. Ole por el fútbol inglés y los comentaristas de TVE.

hostiamor dijo...

Hombre, no vas a ser tú el que critique a los que salen de fiesta, verdad? Je, je.
2-0 al tran tran y Ronnie titular porque si no se va a montá un follón ...

Anónimo dijo...

3-2. Patint patint, golazo de Iniesta en el 89.