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viernes, 24 de agosto de 2007

Dietas y milagros

Estos días en los que sigo frecuentando las piscinas municipales (en este caso las cubiertas del Sagnier) mientras me debato entre el asco y el aburrimiento, estoy elaborando una de mis famosas teorías que paso a exponer a continuación.
En el mundo de la piscina hay tanto freak si no más que en el del running. Estoy viendo a personajes que van cada día y todo lo que hacen es estarse un rato en la piscina de hidromasaje o como mucho dar cuatro paseos en la de los niños. Y todo esto con un barrigón de consideración.
Seguramente estos individuos luego dirán: "pues no entiendo cómo estoy gordo si cada día me pego tres horas en el gimnasio". Ah, amigo, es que estar no es lo mismo que hacer como demuestra la competitividad de todas las empresas de nuestro alrededor donde la gente está doce horas en el lugar de trabajo que se descomponen en: 5 horas navegando, 4 horas entre desayuno, comidas y cafés, 1 hora al teléfono y quizá una hora currando (la otra la dejamos en un cajón de sastre que puede incluir lavabos, cigarritos, etc).
La pregunta más fascinante que me han hecho respecto a lo de las dietas es: "ese té (rojo) que tomas tú, adelgaza?". Hombre, si a la infusión le sumas de 40 a 70 kms corriendo a la semana al menos sirve para mantenerse pero adelgazar, no hay nada en el mundo que adelgace.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahora que frecuentas piscinas....¿podrías elaborar otra teoría sobre si estamos mejor en biquini o como nuestras madres nos trajeron al mundo? ¿o tal vez mejor sólo con el gorro?...Yo voy a matizar...Mejor con biquini que con ropa...¿Lo dejamos así?

Saludos desde Londres, donde te sigo leyendo!!!

hostiamor dijo...

Hombreeee. Ninguna duda. Un 98 por ciento de la población vestido de pies a cabeza incluyendo capucha. La burka podría ser una buena prenda.
Se podrían hacer excepciones y permitir alguna sandalia o descubrir alguna cabeza pero poco más.
Seguiré estudiando.
Y eso que aún no he entrado en la sauna, que eso tiene que ser ...