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miércoles, 15 de agosto de 2007

Woody Allen

Aún no me había dignado a escribir sobre el cineasta/trompetista o clarinetista neyorquino pero habrá que dar fe que nos han visitado Bardem, Johanson y compañía.
Por decirlo en pocas palabras: que estoy hasta las pelotas del seguimiento de la película del tipo este. Vale que será muy interesante lo que haga y que es un cine muy de autor y lo que querais pero yo no pienso ver la película. Ojo, que tampoco es ningún berrinchillo porque que yo recuerde, no he visto ninguna película suya pero es que suena a tomadura de pelo que lo reciban rectores de universidad, que ministros se den de hostias por aparecer en la foto, que lo subvencionen con un millón de euros cuando no funcionan los trenes ni la luz ni demás y un largo etcétera.
Que hay que vender la imagen de Barcelona ... pues habrá que ver dónde metemos más guiris porque yo diría que por el centro no cabe ni uno más. Y anda que son un turismo de calidad. Cuando nació la Elsa para celebrarlo fui al McDonalds y vi a un señor enorme comerse la hamburguesa más ridícula (y barata) que tenían. Y yo con dos big macs, patatas y coca-cola que un día es un día.
Es que si lo de la visita pasase en Macedonia diríamos: pobres muertos de hambre, como no tienen a nadie interesante en el país, pues lo reciben como tratan a Eto'o en Camerún.
Y encima por lo visto quería que el Bardem fuera torero. Ahí esa originalidad. Lo has clavao, chaval.

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