Olimpiada (3ª parte): Trampas y tropiezos

No habíamos analizado (el término nos viene de perlas) los casos de positivos en los Juegos.
El primero fue el de la ciclista española Maribel Moreno que no se ha podido resitir a la llamada del EPO. Y al hacerle la analítica alega una crisis de ansiedad y para casa. Al menos podía haber dado la cara y confesar que es una tramposa.
Otro caso que en un principio me sorprendió fue el de un coreano tirador de carabina (una de mis disciplinas preferidas). En principio parece una tontería hasta que escuchas que es de una sustancia que suprime los temblores.
Y en el apartado de tropiezos, destacar los de Marta Domínguez y la mala pata del vallista chino Liu Xiang lesionado poco antes de competir en la prueba en la que era claro favorito y plusmarquista mundial. Algunos le echarán la culpa a Murphy pero supongo que la culpa del primer caso es la inexperiencia de la palentina en los obstáculos y en el segundo, la exigencia del entrenamiento al más alto nivel.
También ha acabado más de una atleta a remojo en el obstáculo de la ría.
Me ha recordado el tropezón de Gail Devers que le hizo aparecer en la foto finish cayendo en plancha.

Ahora el apunte cultural. Anoche vi la película que se estrena este viernes Don't mess with the Zohan o Zohan, licencia para peinar.
Envalentonado por la proximidad, diría que es lo mejor que he visto desde el Gigolo (ya sabéis mi criterio en cuanto al cine) aunque también es cierto que en los últimos tiempos no he pisado el cine más que para ver dibujos.
Muy recomendable además de muy sencilla de entender en versión original porque se tiran toda la peli hablando con acento de Oriente Medio.