Se acaba la gasolina

Vamos finiquitando los campeonatos del mundo de los deportes de motor. Esta mañana, el insoportable Jorge Lorenzo ha conseguido su bicampeonato de 250 centímetros cúbicos. Con este personaje me pasa como con el mismísimo Sergio Ramos, que me parece un sensacional y espectacular piloto pero como persona es de un engreído y un egocéntrico de cuidado. Sus numeritos cuando acaba las carreras son patéticos y hoy el de Rocky ha sido lamentable. Vamos, de vergüenza ajena. Lo mejor de las motos, cuando el 12+1 veces campeón del mundo le pregunta a Valentino que estaba viendo la carrera de 125 chapurreando italiano y cuando acaba la contestación resume de nuevo en su italiano para los espectadores de tve lo que le había dicho Valentino.
Y por la tarde, festival de los nervios. Hamilton que se caga en la primera curva y pierde todas las opciones y Fernando Alonso que va diciendo que cuando se la jugaba era cuando corría en karts pues le han puesto un vehículo que no es mucho más rápido que loa autos de choque. Y campeón el singracia de Iceman que con su cara de Husky no sabes si acaba de ganar jugando al parchís, si está comprando el pan o si es campeón del mundo de fórmula 1.
De la jornada de fútbol, sólo destacar el gol de Bojan.

Cambiando de registro; lo de RENFE con el transbordo entre Bellvitge y Sants en autocar ya es dantesco. Hoy que es domingo y hay poca gente por lo visto lo han capeado más o menos bien pero mañana por la mañana eso va a ser el cagarse. Tiros va a haber por ir llenando los autocares. Y luego para que te digan que no cojas el coche.
Va a haber gente que con este nuevo transbordo, para llegar a su destino va a dar más saltos que Chuck Norris. ¡Pero quiere dimitir de una puta vez señora Ministra! Y eso que me ha hecho fijo.
La banda original (siguiendo con mi faceta DJ) para la primera parte sería Eye of the tiger o A ella le gusta la gasolinaaaaaaaaaaaaaa y para la segunda, Con el chu cu chu del tren. Obviamente me la trae al pairo si los títulos son realmente así o se aproximan pero la del reguetón va dedicada a la Morsa y sus ex-vecinos a los que desalojó la Benemérita con explosivos mientras él seguía durmiendo.