Rafa no me jodas

Eso es lo que debe estar diciendo Roger Federer tras el palizón que se han pegado los dos mejores jugadores de tenis del momento. Entre la lluvia y los cinco sets infinitos, parecía que iban a estar hasta mañana.
Hay millones de momentos destacables pero aparte de lo tenístico que es una cosa superlativa hasta para los que nos aburre, me quedo con Ramón Calderón que no se pierde ni un sarao. Yo al principio creía que era para aparentar pero empiezo a pensar que es que le gusta (y a quién no) presenciar en directo los grandes eventos deportivos.
El otro punto es la clase de Roger Federer. AcabA el partido y a los dos minutos va a recoger su subcampeonato como si acabase de salir de la ducha en un día de descanso y vestido como si fuese un jugador de principios del siglo XX.
Debo recalcar que se ha cargado de un plumazo la maldición de Queens.

Después de la victoria de la selección española absoluta en el europeo y de un español en Wimbledon, sólo falta que otro gane los 100 metros lisos en la Olimpiada.

Otros que han sufrido las inclemencias del tiempo inglés han sido los de la Fórmula 1. En Silverstone también hay dos inputs. El meneo que les ha dado Hamilton a todos y los CINCO trompos de Felipe Massa. Qué risa de tío. Y el pobre Alonso que ha conducido a la perfección y sin cometer ni un error y hace un mísero sexto porque su equipo no acierta con la táctica ni de casualidad y lleva un coche que no va ni p'atrás.

De momento no hay datos de la moción de censura que he ido a votar afirmativamente. Las encuestas dan vencedor al sí pero sin llegar a los dos tercios necesarios para que salte la junta.

Por último, diré en un muy breve y sin entrar en cuestiones sobre los tiempos que hoy he corrido en Pallejà y la Marina ha vuelto a la cursa en la que debutó el año pasado.