.

.

lunes, 29 de septiembre de 2008

El día de los campeones

Acabaremos con el tema de la cursa local de ayer felicitándonos por los ochocientos y pico acabados y entramos con deportes a lo grande. Encima hoy omitiremos el deporte rey.
Ayer fue un día grandioso para el deporte mundial en general. Octavo campeonato del mundo para Valentino que encima pidió disculpas a sus seguidores por el intervalo de dos años sin victorias en la clasificación general.
Victoria en el primer Gran Premio de Fórmula 1 para Fernando Alonso remontando desde la posición número quince. Tengo serias sospechas que para que saliese el safety car que tanto le benefició, no hubiese órdenes de equipo mandando estrellarse a Nelsinho. Es broma.
Tengo testigos (speedy Seijas y Álex el del golpe contra la mesa) que pueden confirmar que predije la salida del safety a falta de diez u once vueltas y la hostia de rigor del bebedor de vodka finlandés.
Y la traca final una vez más para Haile Gebrselasie que volvió a ganar el Berlín y volvió a rebajar su plusmarca en la distancia del maratón. Y eso que el hombre ya está "lento" para la prueba de los 10.000 metros.
Y eso que haciendo caso de este humilde blog ya llevaba preparada una excusa (en la forma de un dolor en un pie) por si fallaba.

Me veo en la obligación de editar esta entrada para reflejar un extraño suceso (otro más) que tiene lugar en la feria.
Cuando pasas por delante de una tómbola, un señor (desde hace unos años no comunitario) te da dos papeletas. Una no toca y la otra es para canjear por tres boletos. Vas y los cambias. Dos no tocan y uno es para que compres 10 euros y te regalen otros tantos. ¿Por qué cada año repetimos la operación si sabemos lo que nos deparará y no pensamos gastarnos los mencionados diez euros?
¿No será que al atravesar ese punto año tras año caemos en una discontinuidad en el tiempo y siempre vivimos la misma escena?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que crack don Haile. A mi me salen 20,42 km/hora. Que barbaro!!

Salud
David

Anónimo dijo...

Pero....¿alguien quiere tener de verdad lo que toca en las tombolas? ¿alguien quiere una pelota gigante, un peluche idem o un equipo de musica en forma de lata de coca-cola? ¿y que se hace con tanto trasto? Yo, sinceramente, ni regalado quiero nada de lo que sortean ahi....Nunca he entendido el exito de la Montecarlo (este ordenador no pone acentos, no es que yo no sepa ortografia)

Anónimo dijo...

Torrito dijo:

Yo quiero hasta las trompetas llenas de bolas de anís que están clavadas en los palillos que tienes que partir con la escopeta...





Si se repiten más cosas además de los números de tómbola, a ver si tú y tu familia estáis en un día de la marmota anual...