Complejos

Ayer vino el Madrid a jugar al Camp Nou parecido al año pasado, es decir, timorato por no decir cagado. O sea que mientras nosotros intentamos lidiar con nuestro complejo de superioridad, ellos van cargando con un complejo de inferioridad galopante.
Este año es más comprensible debido al penoso estado de forma de su equipo y a la cantidad increíble de lesionados a cuyo club se volvió a unir Sneijder mediada la primera parte.
Planteó un partido Juande casi perfecto. No hubo manera de encarar a los laterales y en las pocas veces que Messi recibía en ventaja, recibía el patadón del madridista de turno. Sin contemplaciones. Si hace unos días escribía que algún árbitro estará deseando expulsarlo para entrar en la historia, parece que algún defensa también quiere entrar en el hall of fame junto a escalofriantes entradas como la de Goikoetxea a Maradona o la de Salgado a Juninho.
El resumen es en un encuentro donde el Madrid jugó al cien por cien de sus posibilidades y un Barça que jugó entre regular y mal, el duelo se decantó del lado azulgrana por dos a cero.
Cierto es que si no llega a ser por Víctor Valdés y en alguno de los zarpazos a la contra marcan, nos metemos en un lío de aúpa.
Imagino que el Madrid cambiará su sistema de juego para recibir en casa a los rivales como el Valencia la próxima semana. Si es así y abre sus líneas olvidándese del vergonzante 4-5-1 bien juntito que presentaba ayer, se va a llevar cuatro goles por partido y va a acabar jugando la Intertoto.
Ah, y menos mal que en la Avenida de Madrid había un chino de guardia para comprar un poncho impermeable porque cayó una cantidad de agua impresionante. No recuerdo algo parecido desde el partido del centenario contra Brasil.