El show de Rudy

No negaremos que el apócope de Rodolfo Fernández suena un poco circense pero el nombre empalidece al lado de los espectáculos que monta el buen hombre en los partidos de basket.
Parece que su calidad y talento casi infinitos van aparejados a un comportamiento un tanto sospechoso. Ojo, que esto habría que corroborarlo porque últimamente tampoco consumo muchísimo baloncesto pero es raro que en poco tiempo lo haya visto en líos con jugadores del Madrid, del Barça, árbitros y demás.
Lo importante, no obstante, es que el Barça de Xavi Pascual juega con una alegría y un desparpajo que no habíamos visto en mucho tiempo y en una situación desesperada ya se ha asegurado una plaza para la Euroliga de la próxima campaña.
Se han llevado de aquí a los malos imitadores de Ilyasova y Acker que se habían arrastrado por los parkets hasta hace un par de meses y el resultado es más que engrescador.
Repito la gran satisfacción de no haber caído ante los insoportables verdinegros y ahora que el Tau reparta ¿suerte? No; leña.

Y para la moción de censura faltan unas mil firmas. Aún me voy a tener que hacer una excursión para apoyarla y que tengamos elecciones. Hay que tener bien presente que con las firmas sólo se conseguiría convocar la moción de censura en sí y que en las votaciones, dos tercios de los votos tendrían que darle el visto bueno. Parece complicado.