Estaba bastante claro como anunciaban las previsiones que el fin de semana iba a llover una vez más.
Pero el tiempo estuvo aguantando hasta que después de los 7 kms a pie nos montamos en las bicis. Empezaba a chispear y al subir la ascensión más importante del tramo de bici empezó a descargar una aguacero importante que en algunos momentos iba incluso acompañada de algo de granizo.
El viento no quiso faltar a la fiesta con lo que el descenso se convirtió en algo infernal.
Para mi desgracia, bajando, pisé algo y pinché la rueda trasera cuando ya me había ventilado lo más duro. Aún suerte que no me caí así que allí tiritando me dispuse a esperar al coche escoba pero como la situación era insostenible me dediqué a parar a todo el coche que pasaba a ver si me remolcaban.
Al menos con esta acción conseguí que unos amables marroquíes me prestasen un rato una de sus chaquetas. O sea, que si me llaman a declarar en su juicio final, están salvados.
Al poco llegó el coche escoba con su calefacción a tope que iba dejando gente en controles para acceder a la meta y formando un auténtico puzzle de bicis en la furgoneta.
Resultado de la duatlón; una auténtica escabechina con 57 abandonos según el acta de los 220 que tomábamos la salida.
Ah, el recorrido para hacerlo con buen día, es precioso.
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3 comentarios:
Esperemos que no sea un mal presagio de la que se nos avecina, Chelsea, Madriz, Villareal, Mallorca, Osasuna y Depor. Ya me se el calendario. Que Dios coja al Barça fresco mental y fisicamente!!! Como voy a sufrir!
Salud
David
Ya no se sufre como antes, en los tiempos de Perico. Bromas aparte, es usted un valiente.
Y sí, quin patiment.
Yo como sigo guardiolando con el fervor del converso lo veo así:
aun perdiendo en Madrid salimos líderes.
Si no eres capaz de ganar los cuatro partidos restantes y ellos sí, sólo queda decir: chapeau o chapó y felicidades que te lo has ganado.
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