Cesc Fàbregas

Como volvemos a ver la liga perdida y no hay manera de vender periódicos, empezamos de nuevo las subastas de los grandes nombres como si de la campaña electoral se tratase.
Hoy toca el turno de Cesc. Que quede claro que soy un firme detractor de su fichaje. Como dijo Lorenzo Sanz: el que se va del Madrid por dinero no puede volver nunca más. Sé que el personaje tiene su gracia pero el fondo lo suscribo al siento por siento. Buf, acabo de descubrir googleando que la frase originaria es de Santiago Bernabéu. Me está entrando una mala hostia como al del chiste del tricornio o como al que nombran jefe de instrucción...
Volvamos al tema. No puede ser que alguien que no sólo se ha ido sino que ha sido birlado justo cuando está acabando su formación pueda ser tratado como al que ha defendido los mismos colores durante toda su carrera.
Y eso sin contar que este pedazo de jugador tendría una ficha parecida a la de los mejores (bueno, a los mejor pagados que no es lo mismo) futbolistas de la actual plantilla.
En el otro lado de la balanza estaría el hecho de que se fuese del Arsenal acogiéndose a la cláusula de liberación que establece la UEFA. Eso sería pagarle con la misma moneda a los de Highbury o sea, darles en todos los morros después de haber acabado ahora sí al más alto nivel la formación del jugador.