La prueba del algodón (de azúcar)

Debo hacer una excepción en mi larga carrera como corredor y a pesar de aborrecerlo y haberlo confesado una y mil veces, voy a tirar de excusa para hablar de mi desempeño en la 31ª Cursa de Festa Major del Prat.
Me encontraba razonablemente bien, había descansado un par de días para llegar con ganas a la cita y cuando me levanto, noto un malestar en el estómago.
Cáspitas pienso yo (bueno, de hecho me he cagado en la puta) y achaco el malestar a la gastroenteritis que privó a la benjamina de la casa (bueno, la Elsa que eso suena de un cursi que da asco) pero luego en una especie de flashback mental que firmaría el prestigioso director de cine .................. (no sé ninguno) me viene a la memoria que ayer por la noche me metí gran parte de un algodón de azúcar secundado por un bocata de bacon y medio kilo de pipas posteriormente viendo el fútbol.
Quizá podía estribar la causa de la desazón en esa ingesta que podría haber descompensado una máquina que roza la perfección y libre de toxinas como es mi organismo.
Total, que tras pensar en no presentarme a la salida, hago de tripas corazón o mejor dicho de tripas tapón y me persono para recorrer los diez mil metros.
Repaso mentalmente las escapatorias en caso de emergencia gástrica y disputo a un ritmo homogéneo y sin forzar la máquina disfrutando de la sensación de ir mirando caras por el pueblo como si estuviese jugando a ¿Dónde está Wally?
¿Que no he dicho el tiempo, ah, se me habrá olvidado?
Felicidades a los participantes con mención especial a mi señora esposa (Mónica) que ha clavado los tiempos que yo le había pronosticado como realizando una marca dignísima.

Ahora, vamos a darle un vistazo rápido a las goleadas de ayer. Del flashback anterior saltamos a un fast forward para comentar que la primera parte del Madrid fue lamentable y que si no es por el contraataque del empate que viene propiciado por un mal saque de banda del Rayo en zona atacante, se las hubiesen visto moradas.
Muy buenas sensaciones los vallecanos.
De lo que pasó en el Camp Nou sólo me voy a molestar en destacar que Messi intenta batir su récord de distancia en conducción de balón para acabar anotando.
Ayer arrancó en la frontal de área propia para quedarse al filo de la contraria donde lo detuvieron en falta.
No pasa nada, un día de estos más pronto que tarde, lo hará.