Como ya cansa lo de que en las elecciones ningún partido pierde nunca no iremos por ahí. A mí lo que me gusta es cuando algún político es lo suficientemente honesto y tras pegarse un batacazo monumental coge y dimite sin echarle las culpas ni a la ley electoral, ni a los atentados de turno, ni a los ciclos económicos ni a nada.
Pero si eso es un chollo. Cuando un político plega, empieza a recibir comentarios elogiosos de propios y extraños y se puede ir a enriquecerse a la esfera privada sin más complicaciones o simplemente a dar conferencias.
En democracia se tiene lo que se vota, es decir, lo que se merecen los votantes. Habrá quien viendo al del Chiki-chiki pueda no estar de acuerdo ... pues haber votado. Quizá uno discrepe cuando vea al Laporta ... pues te haces socio y ni le firmas, ni le votas.
Otra grandeza de la democracia es que todos los votos valgan por igual. Puede que en plena reunión de vecinos quieras propugnar la necesidad de pasar un psicotécnico o similar para votar pero eso no es así.
Y para concluir con el análisis de los resultados ... pues que no, que definitivamente no ganamos la liga. Esperemos seguir cargándonos las hojas del trébol poco a poco.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Pues hoy ha sido un mirlo blanco de la politica el que ha reconocido el fracaso, tiene barba, una educación exquisita y un jefe que debería ser su subordinado.
Publicar un comentario