Se me hacía extraño anoche ver a Koeman y Bakero, los dos héroes de la penúltima (primera) Copa de Europa del Barça, en el banquillo del Valencia sufriendo un correctivo impresionante por parte del Vila-Real. El 3-0 final fue un regalo para el equipo che que se tendría que haber ido para casa con media docenita.
Como el tiempo de los turrones ya ha pasado, la duda que se me genera es si los triunfadores hace quince años en el Fritz Walter Stadion y Wembley arderán en Falles o al final serán los ninots indultats. Lástima que esto no les haya pasado antes porque cuando un grande cae en barrena no hay quien le salve del descenso.
Juegan los de Pellegrini como un auténtico bloque. Al chileno no le tembló el pulso a la hora de prescindir de Riquelme y a pesar de haber estado a punto de provocar un conflicto diplomático con Argentina, el tiempo le ha dado la razón. Y es que esto es un deporte de equipo. Se presenta un muy interesante cruce de cuartos en la Copa en el que el Barça hará bien en aprender de los precedentes y si hace falta que tiren de hemeroteca en los primeros años de Submarino Amarillo en los que Craioveanu y su panda cada año la liaban.
Alianza de Civilizaciones
Después de la cumbre para la presentación en sociedad de la alianza de las civilizaciones que propugna Zapatero, redada ayer en el Raval y por lo visto encuentran material para hacer explosivos.
Ya lo dice el refrán: A Dios/Alá/Jehová rogando y con el mazo dando. No sé si ahora tenían previsto atentar de nuevo en vísperas de las elecciones pero parece una mala costumbre.
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