Cuando el Madrid fichó a Messi

Uy, perdón que me he dejado un par de letras.
Quería decir cuando fichó a Messina.
Resulta que el ser superior Florentino, en su afán por buscar a lo largo y ancho de la galaxia piezas dignas de pertenecer a su colección, se fijó (bueno, se fijó o bien es que había escuchado que el Barça había intentado contratarlo en alguna ocasión) en el entrenador italiano de pallacanestro Ettore Messina que aterrizaba en la capital con sus cuatro Euroligas ganadas con los conjuntos de la Virtus de Bolonia y el CSKA.
Pues este buen hombre ha conseguido que en la final de Copa del Rey, los de Xavi Pascual (que debe salir bastante más baratito) les den un meneo, que en los cuartos de final los campeones de Europa derroten a los blancos en los dos enfrentamientos de la plaza de toros ésa donde ahora juegan a baloncesto y por último estar a un paso de quedar apeado de la final de la ACB a manos del Baskonia. Y eso será si tiene suerte porque ay como pasen a la final.
El caso es que las similitudes con el portugués que presentan hoy como entrenador de la sección de fútbol parecen evidentes. Dos técnicos que lo han ganado todo con sus equipos anteriores y llegan a la casa blanca para enderezar el rumbo.
Los de aquí que por lo visto han intentado fichar a los dos preparadores vedettes sin éxito y acaban confiando en técnicos de la casa. Tengamos en cuenta eso sí, que no los dejan de fichar por la confianza en Guardiola y Pascual sino porque no se ponen de acuerdo.
Pues ahora, sólo le falta a Mourinho seguir los pasos de su colega el que dice que prefiere jugar a domicilio a hacerlo en casa y fracase estrepitosamente.