Elecciones

Como os anticipé en la entrada de ayer y por lo que pude ver del debate entre los candidatos a la presidencia del Barça mientras hacía mis labores, lo peor del episodio de ayer fue la actuación de Marc Ingla.
Si había alguna opción de que le pudiese votar, esta se ha esfumado por completo. Sólo faltó que increpase a Rosell al darle los buenos días. Va, Sandro, digue-li bon dia, no t'amaguis!
La verdad es que visto lo visto, me están generando una sensación de asco bastante importante y que vienen siete años de presidencia (con permiso de mociones de censura) impresentables. Sí, sí, aún más que estos últimos.
El resto de apreciaciones las podréis encontrar en todos los medios porque por lo que escuché ayer, todo el mundo había sentido lo mismo.
Si me desplazo el domingo hasta los aledaños del Estadi de momento me inclino por votar a Agustí Benedito aunque todo se puede quedar en no votar. Lo que sí es fácil es que vaya por la zona a ver el Barça Atlètic disputarse la plaza de ascenso ni más ni menos que con el equipo que preside Joan Gaspart.

Si os preguntáis el por qué de la nueva imagen que preside el blog, no es un adiós, es un hasta luego a mi querida amiga y razón por la que corro.
Tras los últimos botes caídos en combate y una forma de comer compulsivamente que han dado como resultado el asomarme a mi peso máximo histórico, me doy una temporada de privaciones de la crema que anuncia Valentino, flanes, embutidos, quesos y demás.
El resultado por ahora es excelente lo que nos demuestra que ir al dietista es un canelo. Pregúnteme cómo. Pues le respondo. Coma menos, no pique entre horas y haga ejercicio.