¿Quién se acuerda de Murphy?

Como firme defensor de la tesis de la no-existencia de la ley de Murphy, aprovecho para hacer una especie de epílogo a la entrada de ayer.
Son muchas las voces (ninguna de ellas autorizada) que se han alzado hoy diciendo que menos mal que este día infernal no ha correspondido al día de ayer domingo.
En una situación como la que estamos viviendo en que la nieve cae de forma copiosa cuando nos acercamos a mediados de marzo realizar un esfuerzo como el de la maratón hubiese llevado sin duda a la muerte de 4 o 5 corredores.
Vale, vale, llamadme Piqueras pero con estas condiciones, entre hipotermias, deshidrataciones porque a ver quién es el guapo que bebe agua con el fresquito y demás, se hubiesen acabado las ambulancias de Barcelona.
Claro, que bien mirado, quizá hubiese sido mi única oportunidad de conseguir una posición digna dentro de la prueba.
Repito lo de la nevada porque así cuando dentro de unos años (si es que aún existe este blog) no nos acordemos de la fecha aquella que pegó una nevada del carajo, yendo al buscador de esta página podremos salir de dudas y encontrar esta fecha del 8 de Marzo de 2010.
Porque esto de la nevada, ¿no será una estratagema del alcalde Hereu para demostrar que se pueden celebrar unos JJ.OO de invierno en Barcelona?