La culpa fue del Jabulani

Como dice el analista técnico de Telecinco José Antonio Camacho, la culpa de todo lo malo que le pase a tu equipo es de la pelota.
Bueno, es capaz de decir eso y luego ya algo en plan fina ironía como es: eso, dásela al que no sabe. Haciendo referencia a Andrés Iniesta al que decían había tentado muy seriamente con irse al Madrid hace ya unos cuantos años.
Bastante mejor que el murciano lo ha hecho Hugo Sánchez a pesar de toda la animadversión que en mí despierta. Eso sí, anoche cuando se estaba despidiendo, un poco más y tiene que volver a colocarse los auriculares para comentar la prórroga.
Y ya que hablamos de locutores, narradores, analistas, árbitros y demás colaboradores dejad que hable del que es lo peorcito que he oído desde cualesquiera ondas y no es otro que un tal David Sánchez de Radio Marca. No es que el tipo se avergüence de su falta de conocimientos de lo que va a presenciar sino que se enorgullece de ello y decide ir con uno u otro equipo en función de unas variables absolutamente estúpidas. Yo es que en el Mundial es de las pocas competiciones donde consigo ver partidos manteniendo la neutralidad y simplemente disfrutando por disfrutar. Y eso que en esta edición el disfrute ha sido bastante escaso.
Volviendo al tema estrictamente deportivo, se puede apreciar que la táctica una vez comenzada la competición parece bastante común a todos los equipos.
Defendemos juntitos, lo más concentrados y ordenados que podamos y arriba, se la damos al Villa, Tévez, Forlán o incluso Gio de turno para que la reviente y si la pelota empieza a zigzaguear y el portero se la traga, pues mejor que mejor.
Lo cierto es que las trayectorias que describe el balón que ha inventado Adidas a imagen y semejanza de la organización a la que representa (es decir como el culo) parecen dirigidas con un joystick para dificultar la labor a los guardamentas o simplemente para putearlos.
Quiero volver a destacar el golazo de Van Bronckhorst ya que es un jugador con el que nunca he podido. Ni os cuento cuando enfocaron en el banquillo a Frank (¿o era Ronald?) De Boer.
Aprovecho también para felicitar a su seleccionador Bert Van Marwijk del que no tenía idea ni que existiera y del que acabo de buscar el nombre vía Google.
El resumen del partido de ayer es que se jugaron los únicos tres minutos emocionantes que llevo vistos en el torneo tras el 3-2 de Uruguay que podía haber hecho que Arjen Robben se arrepintiese de haberse adornado con una vaselina cuando podía haber sentenciado con el 4-1.
Ahora a ver quién acaba ganando el título para así estrenar el título de Balón de Oro de la FIFA que nace de fusionar Balón de Oro y FIFA World Player. Si gana Holanda, está cantado que se lo darán a Sneijder por la colección de títulos conseguida.
No me atrevo a pronosticar ni resultado ni signo para el partido de esta noche. Antes de empezar por Sudáfrica hubiese apostado por España sin dudarlo pero a estas alturas de la competición y viendo cómo llegan unos y otros y pensando que a España le pueda entrar vértigo de pisar terreno desconocido, ya reharé la entrada después del encuentro como si fuese el libro 1984 que como bien sabéis tanto me ha impactado y así no fallo.