Y ganó el mejor

La mejor selección española que yo recuerdo -al menos en cuanto a juego se refiere- le ha ganado a una de los peores Alemanias de la historia.
Lástima que las consolas no existan desde hace más tiempo porque cualquier selección de los germanos de hace unos años le hubiese pegado un repaso a esta de narices.
Igual que ha hecho España que ha dado la sensación de jugar los noventa minutos en tercera y con el freno de mano puesto para no hacer mucho daño.
¡Pero si han sido infinitamente superiores hasta en lo físico!
Si el rival de esta noche hubiese vuelto a ser Rusia, se hubiese llevado otra vez tres o cuatro golitos pero a los alemanes aún les queda ese respeto a las estrellitas de la camiseta que indican los campeonatos del mundo que atesoran.
Y lo peor del partido el infame arbitraje. Es para ponerlo en un vídeo de cómo no arbitrar un partido. Mal en todo. La tarjeta de Torres es absurda pero la que ve Casillas es para desmayarse. Y el despeje de voleibol fuera del área de Lehman impagable.
Felicidades a todo aquel que sienta como suyo el triunfo y en general a todos los que hemos disfrutado de una competición magnífica.
Por cierto, a ver si cuando vayan mal dadas se ve tanta camiseta y bandera que nos gusta mucho subirnos al carro de los vencedores.
Y que alguien vigile las banderas en las gradas con los aguiluchos. ¿O acaso sería bonito haber visto esvásticas en el otro fondo?